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Informe de Coyuntura N° 57

POBREZA Y DESOCUPACIÓN EN SALTA

La pobreza monetaria y la falta de empleo con cifras que preocupan

En la medición de la pobreza y la indigencia se procura detectar si las personas y los hogares cuentan con ingresos suficientes para cubrir, la Canasta Básica Total (CBT) en el primer caso y la Canasta Básica Alimentaria (CBA) en el segundo. Este tipo pobreza que se analiza es solo monetaria y no permite dar cuenta del carácter multidimensional (Salud, Educación, Condiciones habitacionales) que tiene, lo cual resulta peligroso para combatir la pobreza real.

Si bien es cierto que existe una correlación importante entre el ingreso monetario disponible y el bienestar, esa correlación es fuerte, pero no perfecta, por lo tanto es recomendable tomar estos datos con cuidado y como aproximados.

La desocupación es el resultado de los desajustes existentes entre la oferta y demanda laboral, un aumento en este indicador tiene consecuencias tanto económicas como sociales.

La pobreza a nivel nacional, en el primer semestre de 2018, alcanzó a un 27,3% de la población, mostrando una baja de 1,3 puntos en relación a igual periodo del año anterior pero una suba de 1,6 en relación al semestre anterior. La indigencia mostró un comportamiento similar, en el primer semestre del 2018 alcanzó al 4,9% de la población.

 

En la provincia de Salta, en el primer semestre de 2018, la pobreza registró una baja de 1 punto en relación a igual semestre del año previo y un aumento en comparación con el segundo semestre de 2017. La indigencia alcanzo al 3,8% de las personas y al 3,2% de los hogares salteños, registrando igual comportamiento al que se dio a nivel provincial en la pobreza.

Como se mencionó anteriormente, el 3,2% de los hogares salteños se encuentran bajo la línea de indigencia, ubicándose por encima del promedio regional NOA (3%).

La desocupación en Salta registro una suba de 2,1 puntos en el segundo trimestre de 2018 en relación al mismo periodo del año pasado y alcanzó una tasa del 10%, sumando 60.000 desempleados en un año.

La Tasa de Desocupación del 10%, antes mencionada, se encuentra por encima, en 2,4 puntos, de la tasa registrada a nivel NOA (7,6%), siendo la más alta de la Región.

 

Los números de la indigencia, pobreza y desocupación son estructurales y muchas fueron las causas que permitieron y siguen permitiendo que esto se manifieste así.

La canasta básica alimentaria y total a largo del tiempo fue incrementando su costo, producto principalmente de la inflación y la crisis económica que golpea al país desde hace varios años, lo que ha permitido que la cantidad de pobres e indigentes sea un flagelo en crecimiento.

Es necesario que el gobierno genere las posibilidades necesarias para poder atraer inversiones que permitan la generación de puestos de trabajo sostenibles en el tiempo, para de esta manera ir de a poco reduciendo la pobreza y la desocupación.

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